Amig@os,
No solo lo que no se mide, sino lo que no se conoce a fondo, no se puede mejorar.
Por tal razón el análisis del diagnóstico básico de la situación de los residuos de manejo especial, cuya regulación y control se inicia en 2004 a la entrada en vigor de la LGPGIR, ha requerido fraccionarse para poner en perspectiva el por qué, para qué y cómo, dicha legislación previó la prevención de su generación, su aprovechamiento y valorización. Ello para lograr la meta de cero residuos a disposición final.
En el Diagnóstico 2020, llama la atención cómo en los últimos años el porcentaje de recuperación de envases de PET, sujetos a un plan de manejo nacional, ha fluctuado entre el 50 y el 60%, para cuyo reciclaje se cuenta con una planta considerada como una de las más modernas y de mayor capacidad del mundo.
A ello se suma el hecho de que la industria de la celulosa y papel, que también ha establecido un plan de manejo nacional de este tipo de residuos, informa que:
“En tan solo cinco años, México avanzó 10 lugares en una modalidad de recuperación: en 2017 pasó del lugar 32 de acopio de fibra secundaria –en 2012– al 22, con un índice de recolección de 52%. En reciclaje avanzó una posición: del lugar cinco –2012– pasó al cuatro en 2017 para el concepto de reciclaje de fibra secundaria mundial, con un porcentaje de 88.4 de fibras secundarias de origen nacional. El resto es importado.”
Preocupa sin embargo, que en el caso de los residuos de la construcción y demolición, para los cuales también se ha establecido un plan de manejo nacional, la planta recicladora instalada en la Ciudad de México:
“Reporta un volumen de agregados reciclados que son reintegrados a la construcción de nuevas obras inferior al 13% de los residuos recibidos y que equivalen a 255,901 toneladas. Esta situación indica que hay un alto almacenamiento de material aprovechable. De continuar esta tendencia, dicha planta llegará a su máxima capacidad y dejará de recibir estos residuos para su reciclaje en la ciudad”.
Ante esta última circunstancia cabe preguntar ¿Qué es lo que ocasiona que los residuos de la construcción reciclados no estén siendo aprovechados? Y de ser el caso ¿para que se busca instalar nuevas plantas de reciclaje de residuos de la construcción en la CDMX? ¿Convendría promover proyectos de arquitectura circular biosustentable en la que los residuos generados en sus obras se aprovechen en ellas o tan cerca de las mismas como sea posible?
En el siguiente artículo sobre la importancia del Diagnóstico Básico para la Gestión de los Residuos 2020, se seguirá ahondando en este tema.
Bienvenidas sus opiniones al respecto y su apoyo para difundir el artículo anexo.
Cristina Cortinas