Orden del día provisional
Canadá, Estados Unidos y México producen una cantidad enorme y creciente de desechos de alimentos, con lo cual aumenta la presión sobre la tierra cultivable, se intensifica el impacto ambiental de la producción agrícola y se impone una carga en los sistemas de abasto y transporte de alimentos. El desperdicio alimentario también complica el cada vez mayor problema de manejar con eficacia y eficiencia los flujos de desechos orgánicos (incluidos alimentos, papel y cartón, madera y ramas de poda). El manejo inadecuado de los desechos orgánicos agrava la contaminación de las cuencas hídricas y de los cuerpos de agua. También puede generar problemas de salud pública, aumentar las enfermedades transmitidas por vectores y contribuir a las difíciles condiciones de vida de las comunidades pobres. Incluso cuando se les dispone adecuadamente en rellenos sanitarios, la descomposición de desechos orgánicos genera emisiones de metano, gas con efecto invernadero de corta vida que es 20 veces más potente que el dióxido de carbono.
Para hacer frente a estos problemas, los gobiernos deben trabajar al lado de la industria y las poblaciones afectadas con objeto de reducir el desperdicio de alimentos y destinar los flujos de desechos orgánicos a usos productivos, como la generación de energía y usos agrícolas. Este foro público del CCPC reunirá a ciudadanos y grupos de interés con expertos del mundo académico, gobiernos y sector privado con el fin de analizar la problemática, así como los desafíos y las oportunidades para reducir, recuperar, desviar y procesar desechos alimentarios y orgánicos. En las sesiones de trabajo se revisarán las fuentes, los tipos y el impacto ambiental de los desechos orgánicos; además, se examinará la capacidad de los tres países para reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos e impulsar la recuperación de desechos orgánicos en América del Norte.